Galileo
de Richard Mills.
26.11.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos
De impecable trayectoria como operista, Richard Mills se había desempeñado en dicho cargo laboral por 11 años.
En ésta ocasión traemos a ustedes la versión completa de la ópera GALILEO, la cual emplea un libreto de Malcolm Angelucci escrito en lengua italiana y latín.
El mismo nos presenta una historia centrada en la búsqueda de la Verdad, de su significado y de su relación con la política y la religión.
Es asimismo una misión espiritual cuestionando la posibilidad de la fe en la vida del ser humano, muy especialmente durante arduos tiempos en presencia de la Plaga.
La estructura básica de la pieza se halla trazada en dos actos simétricos, a modo de gargantuesca narración, en la cual las voces del coro, de gran importancia, alternan con las de los solistas, con partes del coro por momento divididas en pequeños grupos.
En general musicalmente hablando la ecuación total revela una combinación de minimalismo, con elegancia barroca y modernismos à la Stravinskii, pero siempre manteniendo las reglas de la tonalidad, con excepción de los momentos disonantes.
Desintegrados pasajes en forma de citaciones de obras musicales del Renacimiento entran en colisión con rítmicas stravinskianas, durante las cuales los dos percusionistas se lucen plenamente, muy en particular en el acto segundo donde la percusión adquiere por momentos un tinte agresivo.
Pero también, en esta extensa y compleja partitura Mills nos ofrece exquisitos coros en el estilo de Verdi, pasajes líricos que incluyen solos de violín, y algunas instrumentaciones que reflejan las tendencias POP actuales, las cuales se hallan fuera de lugar en una obra de raigambre dramática como GALILEO.
Las líneas vocales son declamatorias sosteniendo la narración, sin lugar a grandes soliloquios y limitándose a breves ariosos, pero de carácter descriptivo.
Es de gran importancia asimismo destacar la presencia de además de la orquesta sinfónica, la de un pequeño grupo de cámara barroco en el escenario.
