¿Cómo medir el grado de evolución tecnológica?

Columna de Carlos Vera

25.05.2023 | tiempo de lectura: < 1 minuto

La escala de Kardashov es uno de los métodos aceptados para medir el grado de evolución tecnológica de una civilización, propuesto en 1964 por el astrofísico ruso Nikolái Kardashev. Tiene tres categorías, llamadas tipo I, II y III, basadas en la cantidad de energía que una civilización es capaz de utilizar de su entorno.

En términos generales, una civilización de tipo I ha logrado el dominio de los recursos de su planeta de origen, tipo II de su sistema planetario, y tipo III de su galaxia. Según esta clasificación, la mínima condición para que un grupo de seres vivos sean considerados una civilización tecnológica es que esos individuos posean inteligencia, sean capaces de intervenir y transformar el ambiente que los rodea, y posean sabiduría (conciencia moral y ética).

La civilización humana tendría actualmente un valor de 0,73 en dicha escala, con cálculos recientes (2021) que sugieren que podríamos alcanzar el estado tipo I en unos 300 años (año 2350), el tipo II en unos cuantos miles de años, y el tipo III entre 100 000 a un millón de años.

Por ejemplo, la humanidad aprendió a dominar la mecánica (cuando usó el primer fémur como martillo), aprendió a dominar la química (cuando descubrió el fuego), aprendió a extraer energía de los objetos que lo rodean (cuando dominó y comprendió la atomística). Se destacó entre el reino animal cuando dejó de usar el medio ambiente tal como está (civilización de tipo I clase 0), lo supo modificar para inventar tecnologías (civilización de tipo I clase 1) y aprendió a “modificarse a sí mismo” con la biotecnología y la bioinformática (civilización de tipo I clase 2).

Viajero del a ciencia, columna de Carlos Vera en Justos y pecadores