“Es tan singular e irrepetible Dieste como Gaudí”
Con el arquitecto y docente Osvaldo Ferreira
04.08.2021 | tiempo de lectura: 2 minutos
Tras el muy fuerte impacto que provocó la noticia de la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la iglesia Cristo Obrero en Atlántida, perteneciente al ingeniero y notorio humanista Emilio Dieste, El Tungue Lé convocó al arquitecto, docente universitario y artista plástico, Osvaldo Ferreira.
Dieste “figura en los libros de todas las universidades del mundo que yo conozco, en estructuras para arquitectos… capítulos dedicados a lo que es la técnica que desarrolló y a su concepción de la arquitectura y la ingeniería y hasta en la vida, que todo va enrabado” en su caso, dice Ferreira.
Y por si no bastara con ello y que importantes universidades norteamericanas hayan declarado el año de Dieste en la década anterior, Ferreira agrega que de “solamente dos arquitectos en el mundo, su obra ha sido nombrada Patrimonio de la Humanidad… el caso de Le Corbusier, nada más y nada menos; y de Gaudí. Fíjense ustedes en qué medallero entramos en esto”. Entiende que “estamos hablando de obras de arte” y que “es tan singular e irrepetible Dieste como Gaudí”, de quién estudió su obra alentado por Torres García.
Ferreira destaca otros aspectos subrayables del tipo de construcción y creación de Dieste. Se trata de lograr “algo económicamente viable a lo cual él le incorpora una sensibilidad sumamente especial y una innovación… Sustituye las láminas, los paraboloides hiperbólicos, todo ese tipo de formas regladas, de doble curvatura y demás, que en el mundo se estaban experimentando en hormigón; él lo lleva a cerámica armada, es decir, lo hacía con ladrillo y en las juntas era dónde iba la arena Portland, y donde además incorporaba hierro. Hacía una gran economía de hierro. Y de tiempo, porque con unas cimbras iba desmoldando día a día y avanzando. Y tenía muy poco material, la resistencia que tiene, no es por exceso de material, ni por tener materiales sofisticados, ni caros. La resistencia estaba dada por la forma. Ladrillo con láminas muy delgadas y livianas”. Jugando también “con la luz, las texturas”.
