Félicien David
Programa consagrado a las canciones artísticas francesas.
15.09.2025 | tiempo de lectura: < 1 minuto

En esta ocasión en LIRICA VIVA tenemos el gran agrado de presentarles una selección de canciones artísticas o mélodies francesas para canto y piano, creadas por un compositor olvidado hasta nuestros días.
Félicien David obtiene su mayor éxito en 1844 con la oda sinfónico-vocal LE DÉSERT, que es hasta el día de hoy la obra que mejor lo representa.
En nuestra época se ha prestado atención asimismo a sus óperas, entre las cuales sobresalen LALLA-ROUKH de 1862, y la ópera de gran espectáculo HERCULANUM, estrenada en París en 1859.
En todas estas composiciones puede detectarse claramente la gran afinidad del músico francés por el exotismo y el colorido de Oriente, como ocurriera asimismo con otros grandes compositores como Georges Bizet o Jules Massenet.
Cuando David compuso sus romanzas estas se hallaban en gran demanda durante la Monarquía, tanto en representaciones en mansiones privadas como en salones públicos de París, siendo inclusivamente seguidas de cerca por la propia prensa.
Pero de la misma manera estas miniaturas musicales compuestas por David datan de un período en el cual habiendo surgido a partir del Lied Germánico, comenzaban a transformarse en un nuevo tipo de canción artística más perfeccionada y ambiciosa, representada en principio por compositores como Meyerbeer o Niedermeyer, y que luego evolucionaría en el concepto de la llamada MÉLODIE francesa en las manos de creadores como Hector Berlioz y Charles Gounod.
Es por tales razones que Félicien David llegó a ser conocido en los círculos artísticos parisinos como: “El Schubert francés”, salvando las oceánicas distancias entre un compositor y otro.