La cena de las burlas.

de Umberto Giordano.

03.12.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos

No es sorpresa alguna para los conocedores del arte lírico italiano, que de las 10 óperas que compusiera Umberto Giordano, ANDREA CHÉNIER sea la que porta en alto el estandarte representativo del músico foggiano, en términos de durabilidad y popularidad, seguida luego por FEDORA, ópera estrenada en Milán en 1898.

No obstante, y a pesar de las alegaciones del propio compositor, quien consideraba a su SIBERIA de 1903 como su mejor logro operístico, existe otra ópera, ya cercana a las postrimerías de la vida compositiva de Giordano, que podría en realidad considerarse como de similar estatura artística a CHÉNIER y a FEDORA, y más aún, superior en lo que respecta a avances en las técnicas de composición de este ilustre músico de la Giovane Scuola Italiana.

Nos referimos a LA CENA DELLE BEFFE, LA CENA DE LAS BURLAS, obra que presentamos integralmente en esta ocasión, un auténtico drama musical ambientado en la Florencia de los Medicis, y una de las obras más difíciles de representar del repertorio italiano, dadas las enormes exigencias depositadas en el papel principal asignado al tenor, el poeta Giannetto Malaspini.

LA CENA nos ofrece una partitura sagaz, brillante, con una soberbia orquestación escrita con mano maestra, y con un lenguaje armónico muy avanzado y rico en disonancias, esto sin perder jamás la brújula de la melodía lírica italiana, como podemos comprobar, por ejemplo, a comienzos del cuarto acto.

Las líneas vocales, aunque de estilo mucho más declamatorio, son tratadas melódica y líricamente, mientras que a la orquesta sí se le asignan pasajes armónicos más avanzados.

Luego de disfrutar del texto y de la música de la misma, comprobaremos que LA CENA DELLE BEFFE es no solo una de las mejores óperas de Umberto Giordano, sino una fabulosa obra maestra malhadada, a la que el tiempo, sin lugar a dudas, hará justicia como bien lo merece.

Nuestra versión en esta oportunidad destaca  el mejor registro sonoro de la ópera, imposible de igualar por ninguna de las otras versiones existentes, ya sean discográficas o no comerciales.