Jorge Guldenzoph fue condenado a 10 años de cárcel por delitos de lesa humanidad
Por reiterados delitos de privación de libertad, abuso de autoridad contra los detenidos y reiterados delitos de lesiones graves, indica la sentencia
22.02.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos
El represor uruguayo Jorge ´El Charleta´ Guldenzoph fue condenado a 10 años de cárcel por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura cívico-militar (1973-1985).
De acuerdo con la sentencia judicial a la que tuvo acceso EFE este jueves, Guldenzoph, quien se desempeñó como funcionario de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia (DNII) del Ministerio del Interior durante la dictadura, fue condenado el pasado 15 de febrero a 10 años de penitenciaría.
El represor fue condenado como autor penalmente responsable de «reiterados delitos de privación de libertad», así como de abuso de autoridad contra los detenidos «en concurso formal con reiterados delitos de lesiones graves», según recoge la sentencia de la jueza penal de 23º turno Isaura Tórtora.
A la pena de 10 años, acota el texto, se le descontará la prisión preventiva cumplida desde su procesamiento con prisión, efectuado en julio de 2020.
Como resume el portal especializado en crímenes de lesa humanidad cometidos en el marco del denominado Plan Cóndor durante la dictadura en el país Sitios de Memoria Uruguay, ´El Charleta´ era militante de la Unión de Juventudes Comunistas y actuó «como delator, torturador y abusador sexual durante la dictadura» desde la DNII.
El sitio acota que la causa judicial por la que fue condenado Guldenzoph tuvo su origen en una denuncia colectiva de 2011 presentada por más de 40 víctimas y que «a esta se incorporó una causa anterior, también por torturas, que había sido presentada en 1985».
«Durante años permaneció impune y se desarrolló como empresario privado vinculado, entre otros grupos, a la Secta Moon», añade el portal.
Como consta en la sentencia, las víctimas señalaron a Guldenzoph como partícipe de «interrogatorios mediante tratos crueles e inhumanos, lesiones de entidad ocasionadas y privación de libertad».
«El encausado formaba parte de un plan sistemático y coordinado con el objeto de la persecución de los opositores al régimen de facto; en ese contexto (…) a sabiendas de su accionar, ocasionó la privación de libertad, el abuso de autoridad contra los detenidos y las lesiones graves, poniendo en riesgo la vida de las víctimas», detalla la sentencia.
Texto: EFE – Foto: Santiago Mazzarovich/AdhocFotos