Arazatí: Delgado calificó la sentencia del juez Recarey como “insólita e inexplicable”

«La justicia se puede criticar, se pueden criticar los fallos de los jueces, se pueden criticar las decisiones políticas… Ahora, la justicia se acata, que es otra cosa diferente», aseguró

26.06.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos

Esta mañana, en el marco de un Desayuno de ADM, el precandidato presidencial por el Partido Nacional, Álvaro Delgado destacó la importancia del proyecto Arazatí, que implica una inversión de 300 millones de dólares y busca proporcionar una fuente alternativa de agua potable para la zona metropolitana. Aseguró que “es imprescindible, la tendrían que haber hecho antes”, refiriéndose a los gobiernos del Frente Amplio. Criticó la gestión de fondos en proyectos anteriores, señalando que, si se hubieran destinado recursos a Arazatí en lugar de otros emprendimientos, como la regasificadora, Pluna, y Ancap, “quizá no hubiéramos tenido el problema del agua que tuvimos el invierno pasado en la zona metropolitana”.

El precandidato también defendió la labor del gobierno durante la crisis hídrica, asegurando que, a pesar de las dificultades, «no hubo un día que la gente no tuviera agua apta para consumo humano». Sin embargo, expresó su desacuerdo con la decisión del juez Recarey, quien ordenó a OSE no suscribir el contrato para la construcción del proyecto Arazatí hasta que no haya una resolución judicial que disponga lo contrario.

“Esta decisión, ayer nos enteramos que un juez, la justicia, y quiero decirlo clarito, pero quiero decirlo firme, la justicia se puede criticar, se pueden criticar los fallos de los jueces, se pueden criticar las decisiones políticas… Ahora, la justicia se acata, que es otra cosa diferente,” afirmó Delgado. Anunció que el gobierno apelará la sentencia, calificándola de “insólita e inexplicable”. Recordó que Recarey ya había sido sancionado anteriormente por la Suprema Corte de Justicia durante la pandemia, cuando intentó frenar la vacunación a niños menores de 13 años.

Delgado concluyó sus declaraciones con la esperanza de que la apelación del gobierno tenga éxito y se logre avanzar con el proyecto, destacando que “la zona metropolitana tenga una fuente alternativa de agua potable para 50 años, la obra más importante después de Aguas Corrientes de hace 150 años en el Uruguay”.

El contexto de estas declaraciones radica en la reciente sentencia del Juzgado Civil de 9º turno, que respondió a una medida cautelar solicitada por la Comisión Nacional en Defensa del Agua y la Vida y la organización social Tucu Tucu. Estas entidades, patrocinadas por el Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho de la Udelar, lograron que el juez Recarey ordenara la suspensión de la firma del contrato con el consorcio Aguas de Montevideo, formado por las empresas constructoras Berkes, Ciemsa y Saceem.

Raúl Montero, presidente de OSE, también ha defendido la importancia del proyecto Neptuno, negando cualquier violación constitucional o privatización del suministro de agua, y confirmó que el organismo trabaja en la apelación a la sentencia.

 

 

Foto: ADM Uruguay