CIDH ve «imposible» desplegar medidas para tener comicios libres en Nicaragua

El presidente Daniel Ortega busca su reelección en los comicios del domingo 7 de noviembre

03.11.2021 | tiempo de lectura: 2 minutos

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) consideró este miércoles «imposible» que se puedan adoptar medidas que aseguren la realización de unas elecciones «libres, justas, transparentes y pluralistas» en Nicaragua este domingo, en las que el presidente Daniel Ortega busca su reelección.

Durante una sesión virtual del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), la presidenta de la CIDH, Antonia Urrejola, presentó el informe «Concentración del poder y debilitamiento del Estado de derecho en Nicaragua», dado a conocer por ese organismo el pasado jueves.

En el encuentro no participó Nicaragua, cuyo representante tachó de «evidentemente sesgado» el documento en un mensaje virtual que dio al comienzo de las deliberaciones.

A cuatro días de las elecciones en Nicaragua, «es imposible el despliegue de medidas que aseguren la realización de unas elecciones libres, justas, transparentes y pluralistas en el país», advirtió Urrejola.

La funcionaria aseguró las elecciones tendrán lugar en un contexto caracterizado por la «concentración del poder» por parte del Ejecutivo, que ha facilitado que Nicaragua «se transforme en un estado policial de facto».

Denunció que el Gobierno tiene instalado «un régimen de supresión de todas las libertades, mediante el control y vigilancia de la ciudadanía y la represión», y lamentó que en el país no existe «un sistema de pesos y contrapesos, puesto que todas las instituciones responden a las decisiones del Ejecutivo».

De acuerdo a Urrejola, la CIDH ha constatado en los últimos meses la intensificación de la represión a través de un conjunto de acciones, entre ellas, la detención arbitraria y criminalización de más de 30 personas «bajo cargos infundados y sin las debidas garantías judiciales», incluyendo 7 precandidatos a la Presidencia.

Además, dio cuenta de la cancelación de la personería jurídica de tres partidos políticos «y el hostigamiento a las organizaciones civiles y de derechos humanos», así como a la prensa independiente.

La presidenta de la CIDH se refirió igualmente a la «represión» iniciada en abril de 2018, cuando Nicaragua fue escenario de protestas, y que, según ese organismo, habrían resultado hasta octubre pasado «en al menos 328 víctimas fatales».

Asimismo, indicó que 1.614 personas han sido privadas de la libertad «como represalia por haber participado en actos de protesta u oposición al Gobierno», de las cuales más de 145 aún permanecen detenidas, mientras que más de 103.600 nicaragüenses han salido de su país «en busca de protección internacional».

En la sesión, el representante interino de EE.UU. ante la OEA, Bradley A. Freden, lamentó que el pueblo nicaragüense «sabe que toda esperanza de que las elecciones del 7 de noviembre sean libres e imparciales se ha evaporado».

«Me duele decir que con la decisión del Gobierno de Ortega y (su esposa y vicepresidenta, Rosario) Murillo de prohibir al último partido legítimo de oposición, las elecciones programadas para este domingo han perdido toda credibilidad y son simplemente una mentira», agregó.

En la misma línea se pronunció el embajador de Canadá ante ese organismo, Hugh Adsett, quien señaló que no pueden «guardar silencio» frente a un «régimen» que detiene a sus opositores y oprime a los representantes de la sociedad civil.

«El evento que está por realizarse el 7 de noviembre es una parodia de elecciones», puntualizó el diplomático.

Texto y foto: EFE