Desarticulan en Paysandú una red internacional que robaba cables de cobre de Antel

Se interceptó un camión en la zona de Chapicuy con 15 bolsas de cables quemados, con un peso total de más de 850 kilos

06.11.2025 | tiempo de lectura: 2 minutos

La investigación, liderada por el área de Investigaciones de la Jefatura de Paysandú, permitió detener a cuatro ciudadanos argentinos y a un comprador local, responsables de una serie de hurtos de cableado subterráneo de cobre en distintos puntos del departamento. El grupo
simulaba ser una empresa subcontratada y trasladaba el material a Salto para su reducción y venta ilegal.

El jefe de Policía de Paysandú, Alejandro Sánchez, destacó que se trató de una investigación minuciosa que llevó varios meses y que comenzó tras la denuncia de autoridades del ente, preocupadas por la reiteración de incidentes en sus tendidos subterráneos.

La pesquisa permitió determinar que los responsables actuaban de manera coordinada. Uno de ellos había trabajado anteriormente para una empresa subcontratada de Antel, lo que le permitió acceder a planos y datos sobre las zonas donde el cableado de cobre había sido sustituido por fibra óptica.

El grupo alquilaba vehículos en Salto y se presentaba en Paysandú como si fueran trabajadores de una empresa contratista. Con ropa y equipamiento similar al utilizado por las cuadrillas oficiales, cortaban calles, extraían el cableado y trasladaban el material a una chacra en Ruta 90, donde lo quemaban para separar el cobre. Posteriormente, lo llevaban a un local comercial de chatarra en Salto.

El operativo final se concretó el pasado viernes, cuando la Policía interceptó un camión en la zona de Chapicuy con 15 bolsas de cables quemados, con un peso total de más de 850 kilos. En el lugar se detuvo a dos personas y, posteriormente, otras dos fueron arrestadas en la chacra
donde se hallaron más herramientas, ropa, conos y trozos de cable sin quemar.

Las autoridades calificaron el hecho como un golpe importante contra una organización criminal transnacional, que afectaba no solo a Antel, sino también a otros entes públicos y al servicio de alumbrado.

Tras las actuaciones correspondientes, la Justicia Penal imputó y condenó a A.A.O. y a M.R.A., por la comisión de un delito continuado de receptación, en calidad de autores, imponiéndoles como pena 12 meses de prisión a cumplirse en régimen de libertad a prueba, sujeto al
cumplimiento de algunas obligaciones.

 

Texto y foto: Martín Bosco, corresponsal de Radio Uruguay en Paysandú, para Informativo Uruguay.