«Estamos en un estado de guerra», dijo el presidente de Ecuador

En las calles la actividad ha sido muy reducida

11.01.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos

Ecuador no sale todavía de la conmoción causada por la jornada de terror y caos vivida el martes ante las acciones violentas perpetradas por bandas criminales, a las que el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, les ha declarado «la guerra».

El asalto armado y transmitido al canal TC Televisión, el incendio de vehículos, el secuestro de policías y los motines con rehenes en diversas cárceles del país han llevado a Noboa a tomar una decisión polémica e inédita de considerar a los grupos del crimen organizado como actores beligerantes contra la estabilidad del Estado.

Y al decretar el «conflicto armado interno», las bandas criminales que operan en Ecuador pasaron a ser consideradas «terroristas» y objetivos militares a ser «neutralizados», por lo que el primer día bajo este escenario se saldó con «329 terroristas» detenidos y cinco abatidos, mientras que también se registrados dos policías fallecidos y uno herido.

En las calles la actividad ha sido muy reducida, con clases escolares suspendidas, mucha gente resguardada en sus casas, y mucha seguridad en torno al presidencial Palacio de Carondelet.

Mientras, un total de 139 funcionarios de prisiones entre guardias y personal administrativo siguen retenidos en al menos cinco cárceles donde los presos se han amotinado como medida de protesta contra la política de mano duras que Noboa quiere implantar en el sistema penitenciario de Ecuador.

Entre los retenidos hay 125 guardias carcelarios y 14 funcionarios administrativos en las cárceles de Cuenca, Azogues, Napo, Ambato y Latacunga.

De momento Noboa se muestra intransigente a negociar la libertad del personal penitenciario. «Estamos haciendo lo posible y lo imposible para traerlos sanos y salvos, pero no podemos parar una guerra por eso, porque el Estado está en guerra», remarcó.

«Estamos en un estado de guerra y no podemos ceder ante estos terroristas», señaló Noboa en su primera intervención pública desde el estallido de esta crisis, su primera como mandatario tras haber asumido el cargo en noviembre pasado.

Esta ola de violencia se da ante la aparentemente inminente intención del Gobierno de Noboa de aislar a los líderes de las bandas criminales antes de llevarlos a dos cárceles de máxima seguridad cuya construcción prevé presentar este jueves, con un diseño similar a las utilizadas en México y El Salvador.

Las cárceles están en el punto de mira de Noboa después de que hayan sido asesinados en ellas más de 450 presos desde 2020 en una serie de masacres carcelarias por enfrentamientos entre bandas rivales, una violencia que se ha extendido a las calles hasta hacer de Ecuador uno de los países más violentos de la región.

EFE