Guerra en Ucrania: Europa nunca va a reconocer las anexiones, afirmó presidente español
Rusia usó este viernes su derecho de veto para frenar en el Consejo de Seguridad de la ONU una resolución que buscaba condenar los referendos organizados en cuatro regiones ucranianas y su anexión por parte de Moscú
01.10.2022 | tiempo de lectura: 3 minutos
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, aseguró este sábado que ni España ni Europa reconocerán «nunca» las anexiones «ilegales» a Rusia de varios territorios de Ucrania.
Sánchez se refirió a la situación de Ucrania en un foro en la localidad española de Grove (noroeste), después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, firmase ayer viernes los documentos para la anexión de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, zonas ucranianas ocupadas parcialmente por tropas rusas.
El jefe del Ejecutivo indicó que esa firma se llevó a cabo tras «organizar un referéndum de pantomima (sobre la anexión) mientras bombardeaba Zaporiyia asesinando a civiles inocentes con misiles rusos».
«Quiero ser muy claro: ni España, ni Europa vamos a reconocer nunca esa anexión ilegal y exigimos a Putin que abandone Ucrania cuanto antes poniendo punto y final a esta guerra injusta e ilegal», subrayó.
Según Sánchez, Putin sabe que está perdiendo la guerra y que está muy solo. «Cuanto antes tome la decisión correcta de poner fin a la guerra, será mejor para todos. También para él», sentenció.
Estas declaraciones se suman a otras realizadas por gobiernos de diversos países.
Veto ruso en la ONU
Por su parte, Rusia usó este viernes su derecho de veto para frenar en el Consejo de Seguridad de la ONU una resolución que buscaba condenar los referendos organizados en cuatro regiones ucranianas y su anexión por parte de Moscú.
La delegación rusa se quedó sola en su oposición al texto, que recibió el apoyo de diez de los quince países del Consejo de Seguridad, mientras que cuatro (China, India, Brasil y Gabón) se abstuvieron.
El voto tuvo lugar apenas unas horas después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, rubricase en el Kremlin los documentos para la anexión de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, zonas controladas parcialmente por fuerzas rusas y que suponen el 15 % del territorio de Ucrania.
La resolución presentada en la ONU por Estados Unidos y Albania condenaba los referendos «ilegales» llevados a cabo en las cuatro regiones, pedía a la comunidad internacional no reconocer ningún cambio en su estatus y exigía la retirada de las tropas rusas de Ucrania.
Rusia se queda sola
La representante estadounidense, Linda Thomas-Greenfield, y su homóloga británica, Barbara Woodward, destacaron el aislamiento de Rusia, apuntando que ningún otro país votó con ella y Thomas-Greenfield apuntó que incluso quienes se abstuvieron mostraron su inquietud por lo que el Kremlin está haciendo en Ucrania.
China, que ha tratado de mantener una postura más o menos equidistante desde el estallido del conflicto, reiteró hoy que cree que debe respetarse la «soberanía e integridad territorial», pero volvió a evitar criticar abiertamente a Moscú y recordó que las «legítimas preocupaciones de seguridad de todas las partes» deben tenerse en cuenta, en una referencia a las denuncias rusas sobre la expansión de la OTAN.
Mientras, Brasil y la India consideraron que la resolución presentada hoy no ayudaba a rebajar la tensión y hacía aún más difícil el diálogo que consideran necesario para poner fin a la guerra.
Tras el veto ruso, EE.UU. confirmó que planea llevar ahora el texto a la Asamblea General de la ONU, donde no hay posibilidad de que Moscú lo bloquee y donde ya se condenó con abrumadora mayoría la invasión, pero cuyas resoluciones tienen menos peso.
El embajador ruso, Vasili Nebenzia, calificó el documento votado hoy como una «acción hostil por parte de Occidente» y como una «provocación».
«¿Creen seriamente que Rusia puede considerar y apoyar este borrador? Y si no lo creen, entonces es que nos están empujando de forma intencionada a usar el veto (para decir) que Rusia abusa de este derecho», insistió Nebenzia.
El representante de Moscú defendió la legalidad de las consultas llevadas a cabo en Donetsk, Luhansk, Jersón y Zaporiyia y destacó que quienes votaron mostraron un apoyo abrumador a unirse a Rusia.
Además, cargó contra el secretario general de la ONU, António Guterres, que ayer mismo había rechazado con contundencia los referendos y que había llamado a condenar la anexión de territorio ucraniano.
Debate sobre gasoductos
A petición de Rusia, el Consejo de Seguridad también abordó el viernes las fugas detectadas en los gasoductos Nord Stream y Nord Stream 2, una sesión que desembocó en un nuevo episodio de acusaciones cruzadas entre las potencias.
La delegación rusa, tal y como ya había hecho Putin, sugirió que Washington es quien está detrás de este presunto sabotaje, recalcando que Estados Unidos y sus empresas gasísticas son los grandes beneficiados de la inutilización de estas tuberías.
Mientras, la delegación estadounidense negó «categóricamente cualquier participación en este incidente» y acusó al Kremlin de difundir «teorías conspiratorias» y «desinformación masiva» para tratar de tapar los crímenes que está cometiendo en Ucrania.
Texto y foto: EFE