Historias del interior profundo: el niño, su maestra y un relato de vida
Augusto Errandonea obtuvo el primer premio en el concurso de relatos del Club Nacional de Fútbol en el que participaron 64 escuelas rurales de todo el país
14.09.2022 | tiempo de lectura: 2 minutos
En Justos y Pecadores conversamos con la maestra Ana Batista y el alumno Augusto Errandonea de la escuela N° 63 de Paso de la Cruz, en Tomas Gomensoro, en Artigas, quien obtuvo el primer premio en el concurso de relatos organizado por el Club Nacional de Fútbol en el que participaron 64 escuelas rurales de todo el país
Hay historias que merecen contarse. Historias de vida que van de la mano de la resiliencia y la perseverancia. Historia que, para los capitalinos, transcurren en lugares lejanos del mismo país que habitan. Esta es una de ellas. La historia de Augusto Errandonea, un alumno de 8 años de la escuela Nro 63 en el paraje Paso de la Cruz, en la localidad de Tomás Gomensoro, en el departamento de Artigas y de su maestra Ana Batista. Un detalle: Augusto es el único alumno de la escuela, que con la ayuda de su maestra, ganó el concurso de relatos organizado por el Club Nacional de Fútbol en el que participaron 64 escuelas rurales de todo el país.
Vía video, Augusto Errandonea, envío un audio a Justos y pecadores donde narró de qué trata su relato, que gira en torno a los jugadores de Nacional y, por supuesto, Luis Suárez. “El relato es sobre cómo sería un día con los jugadores en una cancha de fútbol y sería un día muy diferente a como es un día como este en la escuela, o en mi casa, en la ciudad de mi tía, en todas partes”.
“A veces”, continúa Augusto, “jugamos al fútbol acá. Solo que en ocasiones no podemos hacerlo porque tenemos que trabajar acá. A veces la maestra viene un poco embarrada, un poco empantanada. Somos como un dúo. Compañera y compañero. Amigos, la quiero mucho. Eso sí, es como una súper maestra”.
La maestra Ana Batista contó a Justos y pecadores que la consigna del concurso era escribir un relato y enviarlo junto con un dibujo de cómo sería un día con el plantel del Club Nacional de Fútbol.
“Yo soy muy futbolera, hincha de Nacional y juego al fútbol con Augusto. Se lo comenté, le gustó y le dije ´vamos a construir ese relato´. Le gustó la idea y como docente fui haciendo las correcciones pertinentes y después el dibujo. Y lo enviamos. Yo no quería generar expectativa en el niño y le dije que lo más importante es la participación y conectarse con las demás instituciones que participaron”, explicó Batista.
La maestra sostuvo que trabajan la huerta juntos, tienen un proyecto de robótica, una investigación en curso sobre las hormigas y los hormigueros. Creo mucho en una escuela viva, una escuela en movimiento, que participa y se involucra”, subrayó la docente.
Ahora, alumno y maestra se preparan para viajar a Montevideo, conocer el Gran Parque Central, almorzar con los jugadores y, por supuesto, poder conocer a Luis Suárez.
