Lula ante el mayor desafío de su nuevo gobierno

Análisis de Mauricio Rabuffetti

09.01.2023 | tiempo de lectura: < 1 minuto

El presidente Luiz Inacio Lula da Silva sabía cuando asumió hace una semana que uno de los mayores desafíos de su nuevo gobierno sería unir a un país polarizado. Pero no imaginó que apenas siete días después una turba de seguidores del exmandatario Jair Bolsonaro invadiría por la fuerza las sedes de los tres poderes de la República.

La violencia y los destrozos tienen un profundo carácter simbólico en una ciudad como Brasilia, sede de gobierno. Los manifestantes intentaron instigar a las fuerzas a militares a desplazar a Lula del poder. Fracasaron en su intento y los hechos fueron unánimemente condenados por los principales dirigentes políticos y partidos brasileños, y alrededor del mundo.

Ahora, Lula, electo en octubre por mayoría popular, volvió al trabajo en un palacio del Planalto dañado, el mismo lunes. ¿Qué significa esta asonada y qué consecuencias tiene para la democracia brasileña?

En tránsito, columna internacional de Mauricio Rabuffetti en Justos y pecadores