Malán: No hay certeza de que frutas o verduras no tengan residuos nocivos para la salud
Entrevista con el diputado frenteamplista por Soriano, Enzo Malán
31.10.2023 | tiempo de lectura: 2 minutos
En el 2000 había 9000 hectáreas plantadas de soja, hoy son un millón trescientos treinta y cuatro hectáreas de soja, sostuvo el diputado frenteamplista por Soriano Enzo Malán, quien se refirió en Justos y pecadores a su proyecto de regulación del uso de plaguicidas.
Malán señaló que Soriano es uno de los departamentos con tierras más ricas del Uruguay, que tiene casi la mitad de la población con situaciones problemáticas con el trabajo. “O están desempleados, en situación de precariedad o está en la informalidad”, sostuvo.
En cuanto a su proyecto de regulación del uso de plaguicidas se preguntó: “¿Son solamente los agroquímicos el problema de las contaminaciones del agua y el medioambiente?”. Puso como ejemplo el lavado de tasas con detergente de cocina y señaló la necesidad de que exista una planta de procesamiento de efluentes.
“Esa agua con la que se lava una taza va al río. O sea, no hay que ponerle todo el acento al campo, sino que lo urbano es importante. En este proyecto que hemos elaborado ponemos la atención en los agroquímicos. Por ejemplo, en el 2000, en Uruguay había nueve mil hectáreas de soja. Quince años después hay un millón trescientos treinta y cuatro hectáreas de soja. Lo agroquímicos aumentaron exponencialmente”, señaló.
Según los cálculos se multiplicaron por 700 la cantidad de agroquímicos que están en la tierra, después se escurren y van a las cañadas, arroyos y ríos, por lo que el proyecto de Malán plantea dos conceptos, teniendo en cuenta que no todos los agroquímicos son iguales. Uno es la inocuidad y el otro es la transición.
“La inocuidad es que uno tenga la certeza que al comer una fruta o una verdura no va haber ningún residuo químico que sea nocivo para la salud. Y hoy no lo sabemos. Esa información no es pública”, dijo.
En cuanto al segundo punto, la transición, dijo que hay modalidades agrícolas que están sustentadas en los fitosanitarios, para que las plantas crezcan bien. Tenemos que avanzar hacia otro modelo que busque un equilibro entre la salud, lo ambiental y lo económicamente sustentable. Si prohibimos los agroquímicos se termina la producción, pero si nos quedamos quietos tampoco pasa nada”, reflexionó.
Foto: Javier Calvelo / Adhocfotos
Texto: Justos y pecadores
