Pequeños y grandes actos de humanidad
Hay situaciones de injusticia en la vida de nuestra sociedad, que son ejercidas por poderes tan grandes, que parecen imposibles de cambiar y, sin embargo… pequeños actos de humanidad nos ayudan a enfrentarlas.
03.04.2025 | tiempo de lectura: < 1 minuto

En la novela Cosas pequeñas como esas, de la escritora irlandesa Claire Keegan, conocemos a Bill Furlong, el dueño de un depósito de leña y carbón, que junto a su esposa trabaja mucho para mantener una familia de cinco hijas. En la navidad de 1985, en el frío y neblinoso paisaje del pueblo de New Ross, descubre una situación horrorosa y criminal que lo lleva a actuar, más allá de las consecuencias que tendrá que afrontar.