Programa de Vivienda Sindical alcanzó las 3.200 casas entregadas

Aspira llegar este año a las 4.000

06.02.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos

El pasado sábado, 32 familias de Durazno, integrantes de la Cooperativa La Esperanza (COVILAES) del Programa de Vivienda Sindical, accedieron por primera vez a sus viviendas propias. Durante la entrega de llaves, estuvo presente el intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, así como el presidente del Centro de Estudios Técnicos del Programa de Vivienda Sindical (Cet-PVS), Pablo Antonaz.

Con el sorteo, las familias que forman parte de la cooperativa —entre ellas, 21 jefas de hogar— vieron realizado el sueño de acceder a una vivienda.

La cooperativa, que inició sus obras en setiembre de 2021, está constituida por 32 viviendas que incluyen 12 viviendas de 2 dormitorios, 14 de 3 dormitorios y 6 de 4 dormitorios. El sistema constructivo utilizado en este proyecto fue Emmedue, un sistema no tradicional.

Según expresó Vidalín, la intendencia seguirá adquiriendo terrenos para la construcción y la mejora de hogares, y contó que están apoyando “a todas las cooperativas de viviendas del departamento”, a través del otorgamiento de terrenos, de la realización de cordón cuneta, de la iluminación y del sanemiento, así como con el Ministerio del Interior en todo lo que tiene que ver con seguridad.

“Nada más lindo que ver familias, y en este caso hoy lo hemos disfrutado, con muchos niños y gente joven que indudablemente va a tener un futuro venturoso en este lugar”, consideró el intendente.

Vidalín destacó también el trabajo que realizan las mujeres jefas de hogar en las cooperativas.

“A mí me gusta andar de recorrida, visitarlos, y a quien se ve trabajando es a la mujer. Generalmente, la responsable de que esto sea una realidad es la mujer. Es la que pone mucho más amor, mucho más compromiso, y eso tiene que tener un valor muy especial, de reconocimiento”, sostuvo Vidalín.

Por su parte, Pablo Antonaz, presidente del Cet Pvs, anunció que este año esperan llegar a las 4.000 viviendas entregadas.

“El año pasado llegamos a 3.200 viviendas, es un número muy importante para Uruguay, y este año la meta es llegar a las 4.000 viviendas”, indicó Antonaz y aseguró que es “una alegría enorme” poder entregar estas viviendas en Durazno.

Agregó que durante la construcción de las casas participaron a la par tanto hombres y mujeres, pero resaltó que en este último tiempo se ha visto más presencia de mujeres en las cooperativas.

Antonaz definió al barrio donde fueron construidas las viviendas, como “cooperativo” ya que hay más de 300 familias que vivirán bajo esta modalidad.

“Esto era un campo; entre la intendencia, las cooperativas y el equipo técnico desarrollamos inclusive hasta el fraccionamiento. Primero se delinearon las calles; después los terrenos para cada cooperativa; se hizo un sorteo para que cada cooperativa tuviera su terreno; posteriormente se comenzó el proceso en el Ministerio de Vivienda; se les otorgó el préstamo y luego se comenzó la construcción. Hoy estamos viendo ya la forma que va tomando este barrio cooperativo de más de 300 familias que van a vivir acá en una calidad ambiental y de vivienda destacable”, sostuvo Antonaz.

Angelica González, una de las beneficiarias de las casas, aseguró que es un sueño cumplido. “Creo que dejarle un techo a los hijos es lo más importante y es lo que más feliz me hace. Fueron años de lucha, de venir a trabajar todos los días y hoy se ven los logros”, indicó.

En tanto, Robinson Kurtzemann, presidente de la Cooperativa La Esperanza, aseguró estar “feliz” de tener la llave en mano y de que 32 familias tengan su propia casa.