Refugiados: Uruguay está construyendo un modelo de exportación, afirmó jefe de ACNUR
Entrevista a Juan Ignacio Mondelli, jefe de la Oficina Nacional del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados en Uruguay
31.05.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos
En Justos y pecadores recibimos a Juan Ignacio Mondelli, jefe de la Oficina Nacional del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Uruguay, quien se refirió a los alcances del plan piloto para refugiados y la creación de la residencia por arraigo legal para las personas que ingresan al país
Mondelli señaló que “desde las oficinas ACNUR estamos muy agradecidos por todo el trabajo que ha hecho el gobierno uruguayo para aprobar ambas iniciativas. El programa de residencia por arraigo abre una nueva oportunidad, un nuevo camino, a personas que estaban con solicitudes de refugios pendientes. Ahora, esta semana, con una herramienta que también existe a nivel mundial, que sirve para agilizar, facilitar y otorgar el estatuto de refugiado a personas que podrán merecerlo o necesitarlo”.
En este sentido, resaltó que los dos programas y el trabajo interinstitucional (ministerios e intendencias) y la sociedad civil “muestra una nueva visión del asilo. Uruguay está construyendo un modelo de exportación que se puede replicar en otros países”, afirmó.
En Uruguay, al momento, hay 26 mil solicitantes de asilo pendientes. Agregó que estas dos iniciativas se complementan muy bien y descomprimen dicha situación. Ambas medidas están orientadas a las personas que ya están en territorio uruguayo y que han solicitado el reconocimiento a la condición de refugiado.
“En el caso del programa residencia por arraigo legal, estuvieron trabajando muy fuertemente el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio del Interior y los equipos, que son del más alto nivel, y la Comisión de Refugiados”, afirmó.
Este programa se aprobó por un decreto presidencial y el programa prima facie (a primera vista) fue aprobado por la Comisión de Refugiados, un órgano interministerial.
“Decíamos que son dos programas muy bien venidos por ACNUR, pero también por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que le ha dado la bienvenida al programa de residencia legal por arraigo. Es un contexto regional desafiante, difícil, y que Uruguay en este marco encamine esas dos soluciones es verdaderamente excepcional”, reflexionó.
Consultado por qué una persona llega a la situación de refugiado, Mondelli explicó que “la persecución es cuando una persona ve amenazada su vida, su seguridad, su libertad. Puede ser por razones políticas, religiosas o étnicas. También tenemos las personas que pueden ver amenazadas sus vidas por conflictos armados internas, una guerra o violaciones masivas a los derechos humanos”, señaló.
Texto: Justos y pecadores