Unos 3000 académicos piden investigar "ataque sónico" que disolvió manifestación en Serbia
El gobierno admitió poseer un 'cañón sónico' aunque negó haberlo usado
21.03.2025 | tiempo de lectura: 3 minutos

Más de 3.000 académicos de todo el mundo han firmado en los últimos días una petición internacional en apoyo a los estudiantes de Serbia que demandan una investigación del "ataque sónico" que puso repentino fin a la multitudinaria protesta del pasado 15 de marzo de Belgrado.
"Los informes de una poderosa perturbación sónica inexplicable que causó pánico masivo y movimientos similares a una estampida plantean preguntas alarmantes sobre las tácticas que se utilizan contra ciudadanos pacíficos que ejercen sus derechos básicos", señala la petición, citada hoy por el semanario serbio independiente Radar.
También se subraya que el uso ilegal y deliberado de medios diseñados para causar miedo, confusión y desorden en una reunión pública constituye una "grave violación de los derechos humanos", incluido el derecho de reunión pacífica, el derecho a la integridad física y, en última instancia, el derecho a la vida.
Los estudiantes, la oposición y varias ONG consideran que las autoridades serbias utilizaron un "cañón sónico" prohibido o algo parecido para dispersar a los manifestantes, algo que el gobierno niega rotundamente.
Cientos de miles de personas salieron el 15 de marzo a las calles de Belgrado, en lo que se considera la manifestación más grande de la historia de Serbia.
Los firmantes, entre los que figura el filósofo esloveno Slavoj Zizek, el politólogo estadounidense Francis Fukuyama, el economista francés Thomas Piketty, o la premio nobel francesa de literatura Annie Ernaux, condenan además la campaña de intimidación de las autoridades serbias contra el rector de la Universidad de Belgrado, Vladan Djokic.
Figuras públicas cercanas al presidente de Serbia, el populista nacionalista Aleksandar Vucic, han desatado una campaña de acusaciones, y hasta peticiones de arresto de Djokic, porque éste defiende la integridad académica y los derechos de los estudiantes.
Miles de estudiantes y ciudadanos protestan casi a diario pidiendo responsabilidad después que 16 personas murieran por el derrumbe de un techo en la estación de ferrocarril de Novi Sad en noviembre pasado tras su reciente renovación, una tragedia que los manifestantes atribuyen a la endémica corrupción en el Estado y en el Gobierno.
Belgrado admite poseer un 'cañón sónico' aunque niega haberlo usado
El ministro del Interior de Serbia, Ivica Dacic, ha admitido, tras negarlo rotundamente, que la Policía del país sí posee el 'cañón sónico' antidisturbios, aunque ha vuelto a negar que haya sido usado contra la multitud que el pasado sábado se manifestó en Belgrado contra el Gobierno.
En declaraciones que publicó este miércoles el diario independiente Danas, Dacic reconoció como "torpe" su anterior afirmación negando que la Policía poseyera esas armas ilegales, pues, dijo, lo que había querido dejar claro es que "nunca se había incluido ese recurso en su arsenal de medios de coerción".
El ministro aseguró que los cañones sónicos antidisturbios de las autoridades están almacenados en cajas y no han sido utilizados a pesar de que son propiedad de su ministerio desde 2021, cuando fueron adquiridas en una "inversión fallida", pues nunca llegó a legalizarse.
Con estas declaraciones, Dacic ha reiterado el rechazo de su Gobierno, así como del presidente del país, Aleksander Vucic, de las acusaciones de cientos de manifestantes que aseguran haber sido víctimas de un arma sónica el pasado sábado en Belgrado.
La Comisión Europea (CE) ha pedido una investigación sobre el presunto uso contra manifestantes de un cañón sónico ilegal en Serbia del que el rectorado de la Universidad de Belgrado, la oposición política y grupos estudiantiles acusan al Gobierno.
"Esperamos ahora una investigación rápida, transparente y creíble sobre esas acusaciones", declaró el portavoz de la CE Guillaume Mercier el pasado lunes, en rueda de prensa en Bruselas.
Cinco ONG de Serbia afirman haber sido contactadas por más de 500 participantes en esa protesta que denunciaron el uso de un dispositivo sospechoso de ser un cañón de sonido.
Las supuestas víctimas se quejaron de haber sufrido mareos, zumbidos en los oídos, dolores de cabeza y desorientación.
Varios expertos que analizaron los vídeos publicados por internet de la manifestación dijeron poder constatar cómo de repente la multitud aparece como golpeada por una rápida ola invisible, desatando pánico.
De esas imágenes deducen que alguien utilizó cierto tipo de arma sónico contra los participantes de lo que ha sido la mayor manifestación ciudadana de la masiva ola de protestas antigubernamentales que sacude a Serbia desde principios de noviembre.
Por su parte, Danas afirma poseer el testimonio de un gendarme serbio, cuya identidad no revela, sobre varios cañones sónicos colocados en diversos puntos de la ciudad ese día, uno de ellos sobre un jeep frente al Parlamento.
La líder opositora Marinika Tepic publicó hoy una foto mostrando un jeep colocado durante la protesta delante del Parlamento, detrás del cordón de policías, con algo colocado encima que parece una especie de antena satélite.
Texto y foto: EFE