A cinco años del inicio de la pandemia en Uruguay
Entrevistas al psicólogo Alejandro de Barbieri y al médico intensivista Álvaro Giordano
13.03.2025 | tiempo de lectura: 2 minutos

El psicólogo Alejandro de Barbieri, quien es el creador del proyecto Revolución Colibrí, que durante la pandemia brindó charlas virtuales mensuales y gratuitas, sostuvo que “debemos seguir aprendiendo de la pandemia. Todavía algo nos quedó del estrés postraumático. Por ejemplo, la manera de vincularnos y lo emocional. La importancia de cuidar los vínculos. La importancia de saber que la soledad también nos enferma”.
Autor de varios libros, entre ellos Educar sin culpa, de Barbieri reflexionó sobre la importancia de las relaciones. Así lo desarrolla en “Lo que la pandemia nos dejó”, el último capítulo del referido libro.
“Lo que cura es el vínculo. Está comprobado científicamente que la gente que tiene un apoyo emocional familiar, atraviesa mejor una situación de malestar, de depresión o de dolor”, señaló en Justos y pecadores.
Por su parte, el médico intensivista Álvaro Giordano, que trabajó en la primera línea del Covid y en 2021 fue designado junto a otros colegas para organizar y sostener el Centro Covid 2 de ASSE en el INOT, recordó que “hay tanta densidad de recuerdos y de hechos que pasaron que parece ocurrió hace más tiempo. En aquel momento la situación era de cierta incredulidad e incertidumbre. La declaración de emergencia nos despertó un poco a todos”.
Giordano, autor del libro La Guerra que nos toca, donde narra todo el proceso pandémico en Uruguay -que incluye la preparación de equipos y el aprendizaje de la comunidad científica y médica para enfrentar el Covid-calificó como un antes y después la llegada de la inoculación.
“Era una vacuna que se utilizaba por primera vez en forma masiva, con una tecnología absolutamente nueva. Cuando se completó la vacunación bajó notoriamente el índice de mortalidad. Entre los trabajadores de la salud, había un enorme deseo de vacunarse porque era el escudo interno que podíamos tener. Entrar todos los días a centro hospitalario era como entrar a un incendio”, graficó el médico.
Foto: Santiago Mazzarovich/AdhocFotos