Plan de ocupación de Israel: una tragedia en ciernes
Darío Teitelbaum, referente de izquierda de Israel, advierte sobre los riesgos que trae la estrategia anunciada por Benjamín Netanyahu
09.05.2025 | tiempo de lectura: 2 minutos

Darío Teitelbaum, ciudadano argentino israelí, vive en un kibutz a 7 kilómetros de la frontera con Gaza, y es presidente de la Unión Mundial de Meretz, partido de izquierda de Israel.
El gobierno israelí anunció esta semana un nuevo plan para ampliar sus operaciones en la Franja de Gaza, que pasa por ocupar y retener el enclave palestino y trasladar a su población hacia el sur.
Las operaciones en Gaza han cobrado la vida de miles de palestinos, luego del atentado terrorista de Hamás del 7 de octubre de 2023 sobre Israel, donde murieron cerca de dos mil personas y otras 250 fueron tomadas como rehenes.
Teitelbaum reafirma que se debe reconocer que “el Estado de Israel tiene el derecho a la autodefensa y que Hamás es un movimiento terrorista, pero también, que el pueblo palestino tiene derecho a la autodeterminación”.
Por tanto, un plan para una ocupación total en Gaza “es una tragedia en ciernes”, remarcó.
El dirigente político explicó que a los ciudadanos israelíes les interesa, en primer lugar, la liberación de todos los rehenes, “vivos o muertos”.
Las manifestaciones callejeras se movilizan con ese objetivo, y todas las encuestas indican que prefieren el alto el fuego si con ello se accede a los secuestrados. “Además, una mayor incursión militar no solo pone en riesgo la vida de los casi dos millones de palestinos no involucrados con Hamás, sino también de los rehenes a los que se pretende liberar”, expresó.
El costo de la guerra representa un recorte presupuestal en políticas de salud o educación, “y los ciudadanos reclaman por ello”, aseguró. Y una ocupación de Gaza, implicaría “hacerse cargo de dos millones de palestinos”.
En el entorno de Netanyahu, hay sectores radicales que reclaman la reinstalación de asentamientos judíos en Gaza, “lo que resulta un disparate”, comentó.
A juicio de Teitelbaum, todas las acciones de Netanyahu tienen en cuenta las elecciones de octubre del año próximo. Sostiene que el gobierno israelí quiere evitar la conformación de un comité judicial que revise lo actuado en este período. “Podría ser inculpado”, advirtió.
El premier israelí tiene tres objetivos, según Teitelbaum: “la continuidad en el gobierno, zafar del proceso judicial y cuidar la estabilidad en una coyuntura muy difícil”, enumeró.