Exposición "Miradas Testigo: Médicos Sin Fronteras y Magnum, 50 años en el terreno"

Muestra fotográfica en Montevideo

28.06.2022 | tiempo de lectura: 3 minutos

En Justos y pecadores recibimos a la directora de comunicación de la Oficina de Médicos Sin Fronteras (MSF) para América del Sur, Carolina  Heidenhain,  con motivo de la presentación de la muestra en Montevideo

En Sobre la fotografía, la escritora norteamericana Susan Sontag (1933-2004), escribió  un ensayo sobre el poder de la imagen, publicado en 1973. La autora de La enfermedad y sus metáforas, planteaba en ese volumen que la imagen, como captura de un momento determinado ejercía una fascinación especial sobre el sujeto receptor. Una imagen podía quedar captada en la memoria, como antes en la lente de la  cámara para siempre. La digresión viene al caso frente a la muestra “Miradas Testigo: Médicos Sin Fronteras y Magnum, 50 años en el terreno”, que se exhibe en Montevideo.

Médicos Sin Fronteras nación en diciembre de 1971, a iniciativa de un grupo de profesionales de la salud y periodistas que querían brindar asistencia médica a las poblaciones más vulnerables ante grandes emergencias y, por otro lado, dar testimonios de lo que ellos vivían en los lugares más inaccesibles.

“Esta exposición, de alguna manera, da cuenta de eso. De  dar testimonio, de mostrar, aquello que nuestros equipos médicos ven de primera mano”, explicó la directora de comunicación de la Oficina de Médicos Sin Fronteras (MSF) para América del Sur.

La labor de MSF es un trabajo arriesgado. No solo supone trabajar con poblaciones vulnerables, muchas veces en condiciones infrahumanas, sino también donde se desarrollan conflictos armados.

“Diría que como organización, cada vez nos especializamos más brindando atención sanitaria en contextos de violencia, de conflicto, porque hemos venido notando a lo largo de los años que es donde cada vez hay menos otras organizaciones presentes. Con lo cual creemos que ahí podemos agregar valor. Hay un riesgo, pero eso no significa que Médico Sin Fronteras no cuide muchísimo la seguridad de nuestros colegas, de nuestros compañeros de trabajo. Hay protocolos de seguridad muy estrictos. Nunca nos manejamos con guardias armadas y lo que hacemos es explicarles a todos los actores presentes quiénes somos y para qué estamos y cuáles son nuestros principios de independencia y neutralidad y que estamos ahí para aliviar el sufrimiento de la población”, afirmó.

No obstante, reconoció que hubo oportunidades donde tuvieron que levantar campamento, debido a que no estaban dadas las condiciones de seguridad necesarias. “Es el momento más triste para nosotros”, reconoció Heidenhain, “porque tenemos que priorizar la seguridad, pero eso puede implicar que en algún momento las condiciones no estén dadas y eso tiene consecuencias para la población civil, que muchas veces queda atrapada sin quererlo en ese conflicto”.

Agregó que son una organización que da atención médica, pero que “el poder habilitar y dar esa atención médica es posible no solo por los profesionales sanitarios, sino por otros perfiles que permitan hacer ese trabajo. Siempre pongo el ejemplo de cuando fue el terremoto en Haití en 2010, los hospitales colapsaron junto con el resto de los edificios de Puerto Príncipe. Entonces fue el trabajo de nuestros logistas, de otros de los perfiles que reclutamos, el salir a encontrar y acondicionar espacios para brindar atención de forma urgente. Así hay muchos ejemplos”, ejemplificó.

Sobre cómo ha ido cambiando desde sus inicios la organización, la directora de comunicación de MSF contó que desde sus inicios, hace 50 años, la organización, que es totalmente independiente, ha ido evolucionando pero manteniendo siempre su fin original humanitario.

Manifestó que se avanzó en lo que ha sido el trabajo de creciente profesionalización de ayuda humanitaria por la que Médicos Sin Fronteras ha ido apostando, “con el interés y las ganas de ayudar, profesionalizándose para que fuera de la manera más efectiva posible la llegada. Fortaleciendo las estructuras logísticas para que fueran más establecidas, con procesos de reclutamiento de  profesionales, costeando un sueldo para que puedan solventar su trabajo.

“Ese ha sido el gran cambio junto al intentar hacerlo sin perder la motivación original, la indignación y el gesto humanitario de ir a ayudar a esa persona necesitada”, subrayó Heidenhain.

La muestra de Médicos Sin Fronteras (MSF) y la agencia internacional

Magnum Photos es una exposición fotográfica a cielo abierto que da cuenta de algunas de las crisis humanitarias más relevantes que ha padecido el mundo desde la creación de MSF.

Con producción del Centro de Fotografía de Montevideo (CdF) y con entrada libre, se  presentan una selección de 32 fotografías emblemáticas a nivel mundial y en lugares en donde ha estado presente la organización humanitaria. Veinte de las imágenes datan de las últimas cinco décadas y 12 fueron tomadas entre 2020 y 2021.

“Miradas Testigo: Médicos Sin Fronteras y Magnum, 50 años en el terreno”, tal es el nombre de la mustra, se podrá visitar hasta el 12 de setiembre en la fotogalería Parque Batlle, ubicada en Avenida Merola frente al monumento a La Carreta de José Belloni.