Evaluación del MEC revela deficiencias en libros de texto del sistema educativo uruguayo
«Se evalúan desde cuestiones muy técnicas, como las progresiones pedagógicas, la calidad de la información y el diseño gráfico, hasta si es un libro amigable y que invita a leer», detalló el ministro Da Silveira
15.11.2024 | tiempo de lectura: 2 minutos
Una evaluación llevada a cabo por el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) reveló que el 50% de los libros de texto utilizados actualmente en el sistema educativo uruguayo no alcanzan los estándares internacionales ni los criterios establecidos por un sistema de valoración diseñado específicamente para el país. Esta situación preocupa a las autoridades y destaca la necesidad de un análisis profundo de los recursos pedagógicos empleados en las aulas.
El ministro de Educación y Cultura, Pablo Da Silveira, explicó el proceso detrás de esta evaluación, que se originó hace dos años ante la ausencia de un sistema profesional de análisis de libros de texto en Uruguay, un elemento que sí es común en sistemas educativos avanzados. «Detectamos que en Uruguay faltaba algo que ocurre en los países que tienen sistemas educativos maduros, que es un sistema de evaluación de libros de texto, que sea profesional, externo a quienes toman las decisiones acerca de qué libro se van a usar y que sea público», señaló.
Para desarrollar esta metodología, el MEC trabajó junto a un equipo especializado de la Universidad de Buenos Aires, que ayudó a adaptar un instrumento de evaluación a las particularidades uruguayas. Además, se realizó un ciclo de formación para evaluadores, quienes fueron los encargados de aplicar esta herramienta en un primer análisis de cuatro libros de texto seleccionados.
El resultado de esta primera evaluación reveló que dos de los cuatro libros no alcanzaron el puntaje mínimo considerado satisfactorio. Los otros dos lograron superar este umbral, aunque también se identificaron áreas que requieren mejoras. La evaluación tuvo un enfoque multidimensional, abarcando aspectos técnicos, pedagógicos y gráficos. «Se evalúan desde cuestiones muy técnicas, como las progresiones pedagógicas, la calidad de la información y el diseño gráfico, hasta si es un libro amigable y que invita a leer», detalló Da Silveira.
El ministro también aclaró que el MEC no tiene autoridad para decidir cuáles textos deben usarse o si deben modificarse, ya que esta responsabilidad recae en la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP). Sin embargo, subrayó que el objetivo de estas evaluaciones es proporcionar una herramienta objetiva y profesional para mejorar la calidad de la enseñanza en el país. «Esto no es una cuestión que esté centrada exclusivamente en un punto de cuál es la orientación de los contenidos. Es una evaluación muy profesional y muy amplia», concluyó Da Silveira.
Foto: Daniel Rodriguez /adhocFOTOS
