Florida: Deshechos de talla hallados en Goñi se integran al acervo del Museo Departamental

El hallazgo se produjo durante la exploración para los estudios de impacto de un proyecto de cantera

25.11.2022 | tiempo de lectura: 3 minutos

En la zona de Goñi, en el norte del departamento de Florida, fueron hallados diez deshechos de talla de piedra caliza que surgen como registro de actividad humana de una época que, debido a la falta de información de contexto, no se puede establecer.

El hallazgo se produjo durante la exploración para los estudios de impacto de un proyecto de cantera. “Por normativa, a las empresas que hacen extracción de grava y pedregullo se les pide un estudio de impacto arqueológico, y de otras disciplinas, para ver si hay algún registro que pueda emerger de la zona que se va a explotar”, explicó a Medios Públicos el antropólogo Cristopher Duarte, responsable del hallazgo.

Se trata de diez deshechos de talla, de diferentes tamaños, entre los cuales se encuentra la roca a partir de la cual se iban sacando lascas para la fabricación de instrumentos. Duarte indicó que los deshechos son fragmentos que las personas iban descartando luego de haber tallado la piedra para la obtención de lo que muy posiblemente hayan sido instrumentos para armas y utensilios de la vida cotidiana. “Es una piedra caliza silicificada, lo que regionalmente se conoce como silcreta. El sílice amorfo tiene una gran previsibilidad, es decir que es bastante previsible que al golpearla se va a extraer lo que se quiere extraer. Los filos (de los instrumentos) son muy quirúrgicos, y eso lleva también a que sea fácil el desgaste”. “Son desechos de talla de instrumentos que se elaboraron, que tienen una complejidad; no es que sacaron una lasca y la usaron, sino que sacaron una lasca y la fueron retocando para hacer utensilios que pueden ser desde cuchillos para cortar cueros a punta de proyectiles. Son poco deshechos de talla, y no podemos sacar una conclusión tan general”.

Sin contexto

Duarte explicó que, precisamente, “el problema que existe en estos tipos de hallazgos, que son superficiales, es que no hay contexto; no tenemos los materiales en capa”. Para establecemos la posible edad es necesario el contexto. “Si estos elementos que encontramos en roca estuvieran asociados y enterrados a carbón”, se podría datar y fechar en aproximación.

El antropólogo exploró las fotos de los registros satelitales de años anteriores. “Es una zona con alta actividad agrícola, arándose la tierra. Esa actividad pudo haber removido el material en capa, aflorando lo que se halló, pero perdiéndose su contexto”, comentó.

De todos modos, en la zona delimitada, fueron realizados veinte sondeos en áreas de entre 50 y 40 centímetros, con 30 a 35 de profundidad, y no se halló material. “Esa falta de contexto dificulta aproximarse a la cantidad de años que hace que se realizó esa talla”, insistió.

“Si no se transmite, no es conocimiento científico”

En la arqueología son frecuentes los hallazgos en superficie. “Hay determinados sitios que son como muy específicos. Emergen no diez o veinte deshechos de tallas, sino miles. Sobre todo en la zona del Río Negro medio. Cuando el embalse baja, afloran instrumentos, puntas de proyectiles, etcétera. Claro que el problema de los hallazgos en superficie es la falta de contexto; no los podemos adscribir a determinada antigüedad, y no podemos hacer interpretaciones ni sacar conclusiones de cómo vivieron las personas (que realizaron las tallas) en el pasado”, señaló Duarte.

El antropólogo entiende oportuno hacer “un llamado a la sociedad”. Cuando aparezcan estos tipos de elementos en el campo o en otros lugares, es necesario tomarle fotos, registrar la ubicación —el GPS lo posibilita—, y luego “llevarlos a algún reservorio de material, a algún museo, y entregar toda la información”.

El hallazgo de las diez piezas en Goñi fue entregado al Museo Departamental de Florida, el cual ya lo sumó a su acervo y próximamente las expondrá. “Es patrimonio de todo el Uruguay, de todos los uruguayos. Lo que se hace es transmitir, lo que se encuentra, a la comunidad, a las personas. Si no se transmite no es conocimiento científico; el conocimiento científico tiene que ser comunicable”, comentó Duarte.

El director del museo, Guillermo Montaño, señaló que las piezas serán expuestas junto a piedras talladas y pulidas, “para mostrar la evolución en nuestra edad de piedra. Estamos agradecidos enormemente a Duarte, porque para nosotros es una importante adquisición que nos permite, en esa parte, aumentar el acervo y mostrar, de una manera didáctica, cómo fue la evolución de nuestros indígenas con la piedra”.

Texto y fotos: Emilio Martínez Muracciole