Interrupción voluntaria del embarazo: ¿cómo trabajan los equipos interdisciplinarios?

Informe especial

19.10.2021 | tiempo de lectura: 3 minutos

Tras la propuesta realizada por el dirigente nacionalista Carlos Iafigliola con el objetivo de que se cumpla “a cabalidad” con la ley aprobada en 2012, la ginecóloga Mónica Gorgoroso, referente técnica en Salud Sexual y Reproductiva de ASSE, detalló la conformación y el accionar de los equipos de profesionales que forman parte del procedimiento para que el aborto sea legal.

En entrevista con Justos y pecadores Gorgoroso señaló que los equipos están integrados por un profesional en ginecología, un profesional de salud mental y un profesional del área social. Agregó que tal como lo indica la norma, “su accionar está pautado” y que “tanto la ley, como su decreto reglamentario y las guías de prácticas clínicas nos guían sobre las competencias de cada uno de los profesionales y sobre todo lo que debemos hacer y lo que no debemos hacer”.

Sobre el proceso, Gorgoroso dijo que los pasos “se cumplen sin lugar a dudas” y detalló que en cada uno de los procesos institucionales de IVE la usuaria tuvo que hacer una primera consulta donde manifestó su situación de embarazo y su intención de interrumpirlo, una segunda consulta con el equipo y una tercer con un plazo entre ambas de cinco días. “Esto queda registrado en la historia clínica y en los formularios que la usuaria firma. Es un proceso sumamente regulado y para no ser penalizado tiene que cumplir con estos plazos”.

Según datos del MSP, incluídos en el último informe sobre aborto de MYSU, desde que se instalaron los servicios en Uruguay desde el 2013 al 2020 se registraron 75.117 abortos de los cuales 36.998 se realizaron en los servicios públicos y 38.119 en el subsistema mutual.

La atención, según la referente es integral e individual. “Tal vez puede verse desde otros lugares como un trámite pero para nosotros es un espacio de atención, que le aporte lo que ella considera necesario para tomar su decisión”, subrayó.

Toda mujer que consulta tiene tres opciones: interrumpir el embarazo, continuarlo y hacer frente a la crianza, o continuarlo y pasar por un proceso de desvinculación y adopción. “De las usuarias, la gran mayoría o ya tienen una decisión tomada o la rectifican en el proceso. Entre un 3% y 5% de las mujeres que consultan deciden continuarlo”, mencionó.

Recientemente, el dirigente nacionalista Carlos Iafigliola inició una recorrida por diferentes departamentos del país con el objetivo de que se cumpla “a cabalidad” la ley de la interrupción voluntaria del embarazo, aprobada en 2012. “Queremos que se cumpla con la ley, que se tengan presente los artículos tres y cinco como corresponde, cosa que hoy no se está haciendo”, dijo.

Iafigliola propone que el equipo interdisciplinario que toma contacto con la mujer que desea abortar le ofrezca alternativas tales como vincularse con la ONG Ceprodih, asociación que atiende a familias vulnerables.

Sobre este punto, Gorgoroso dijo que para quienes desean continuar con el embarazo se pone arriba de la mesa los apoyos o las prestaciones sociales además de las prestaciones propias del cuidado del embarazo a las que tiene acceso. Y aclaró “las mujeres que desean continuar con el embarazo y tienen dificultades económicas o sociales muy probablemente no consulten en los servicios de IVE pero sí en los servicios de control de embarazo donde también hay usuarias en condiciones de vulnerabilidad que necesitan esos apoyos”.

La ginecóloga reconoció, no obstante, que si bien el país ha dado muchos pasos normativos y sociales, “la interrupción de un embarazo es estigmatizada y las personas no suelen hablar abiertamente de estos temas”.

En ese sentido, la información es clave. Desde noviembre del año pasado existe en nuestro país una red de acompañamiento feminista llamada “Las Lilas”. Tamara Savio, vocero de la red explicó que la iniciativa surgió con la finalidad de difundir la normativa vigente para acceder al aborto legal, informar cómo funciona la medicación, donde están los servicios y poder acompañar a quienes lo decidan para que lo hagan de forma segura.

“Es información que está pero no se difunde”, dijo Savio. La red está presente en 12 de los 19 departamentos y sus integrantes participan de un curso de formación. Desde enero a agosto realizaron más de 120 acompañamientos.

Entre los desafíos, buscan seguir creciendo y estar en más departamentos para asesorar a más personas. Del mismo modo se proponen fortalecer la formación para hacer un acompañamiento de calidad y más adelante, mejorar la ley. “La respuesta está siendo como debería ser más allá de las fugas y de las restricciones que contiene”, dijo Savio. “No estamos de acuerdo con este procedimiento tan largo, paternalista y tutelante pero entendemos que es la manera más segura y legal para acceder a la medicación”.

Foto: Javier Calvelo/Adhocfotos