Vivir en situación de calle

Un vocero del colectivo Ni todo está perdido contó la experiencia con los refugios, el acceso a los baños y la violencia en las calles del Municipio B

06.05.2022 | tiempo de lectura: < 1 minuto

El Departamento de Sociología de la Universidad de la República (Udelar), junto con el colectivo Ni todo está perdido (Nitep) y el Municipio B, realizaron una investigación sobre cómo usan la ciudad las personas que no tienen un techo.

Entrevistado por Justos y Pecadores, Gustavo De Pena, uno de los voceros del colectivo Ni todo está perdido, explicó que él se encuentra “en situación de refugio”, pero aclaró que “la mayoría nos llamamos en situación de calle porque pasamos la gran parte del día en la calle, desde la nueve de la mañana que tenemos que salir obligatoriamente y recién se puede volver al refugio partir de las 18 horas”.

“Hay que moverse y cuanto más nuevo uno es en la calle más se tiene que mover”, dijo De Pena. “Primero hay que justificar que uno está en situación de calle y después, para tener acceso a los comedores, hay que justificar que no se tiene ingresos e ir a buscar cada día, un refugio para pasar la noche hasta que se obtiene la permanencia. Es estar en movimiento todo el día justificando que uno está en la indigencia periódicamente”.

El acceso a los baños es todo un tema, aunque aclaró que hay algunos sitios como la Intendencia y otros puntos en Ciudad Vieja. Además, mencionó que se han instalado baños atendidos por el colectivo en al menos ocho lugares.

Sobre la violencia, De Pena dijo que “hay gente que trata mal directamente por ser pobre y hay gente que es solidaria y apoya a los que están en situación de calle. No se puede generalizar, pero hay discriminación por factores netamente económicos”.

Escuchar la entrevista:

 

Foto: Ricardo Antúnez / AdhocFotos