Cómo la industria alimentaria moldeó nuestros gustos desde la infancia
La columna de nutrición de Raquel Villegas.
11.07.2025 | tiempo de lectura: < 1 minuto

En nuestra infancia, los sabores se asocian con momentos emocionalmente significativos: cumpleaños, celebraciones y reuniones familiares. Por eso, muchas personas sienten un apego especial por bebidas saborizadas u otros productos procesados que estuvieron presentes en esos recuerdos "felices". Esa conexión emocional permanece en la adultez, condicionando nuestras elecciones alimentarias sin que seamos plenamente conscientes de ello.