El factor Richard Read
Por Alfonso Lessa
15.11.2022 | tiempo de lectura: 3 minutos
Pocos día atrás el lanzamiento de la biografía de Richard Read en la Feria del Libro, se transformó en un hecho político: la presencia en primera fila del secretario de la Presidencia, Alvaro Delgado, junto al ministro Salinas, el presidente del Partido Nacional, Pablo Iturralde, y el intendente de Canelones, Yamandú Orsi, mostraban en un sala repleta, la importancia del personaje.
En esa presentación oficial del trabajo escrito por Leonardo Haberkornd, también sorprendió la presencia de un actor que desde hace tiempo mantiene un bajo perfil, como el ex ministro de Economía y Finanzas Fernando Lorenzo. Y también había colorados como el senador Tabaré Viera y un alto número de dirigentes sindicales, de la vieja y la nueva guardia. Y otras personalidades como el director del CERES, Ignacio Munyo.
Es decir, no era una más de las presentaciones -muchas muy relevantes- que se suceden año a año en la Feria del Libro que se celebra en la Intendencia de Montevideo.
Read es un militante y dirigente sindical de larga carrera que se ha ganado el respeto en muchos sectores, mucho más allá incluso de la izquierda. Líder en el sector de la bebida, fundador del Plenario Intersindical de Trabajadores (PIT) sobre fines de la dictadura, jugó un papel fundamental en la reorganización gremial e integró, como muchos jóvenes de todos los partidos, lo que se conoce como la generación del 83.
Ha hecho un largo recorrido, es un sobreviviente de aquella generación sindical, fue militante de sectores radicales y se transformó en un referente moderado y componedor, sin bajarse de sus ideas y su estilo negociador, incluso duro cuando la considera necesario.
Con los años se ha vuelto muy crítico de muchos aspectos del Frente Amplio y del PIT-CNT y propuso ideas y posturas renovadoras que lo alejaron de la central y también del FA.
Desde hace tiempo tiene una oficina por la que desfilan dirigentes sindicales, políticos, simples militantes.
Es gente que lo sigue y que ve en él un fuerte potencial político. Y a él, el desafío político no le disgusta, más bien todo lo contrario.
Read tiene muy buena relación con el presidente Lacalle, gente de la coalición de gobierno y también, claro, en la izquierda, más allá de algunos choques ásperos, que en algunos casos han dejado distancias.
Hace algunos días se supo que Read apoyará la candidatura presidencial del intendente de Canelones Yamandú Orsi.
No fue casualidad, entonces, la presencia del jefe comunal canario en la Feria del Libro ni, quizás, la ausencia de la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, que estaba tan cerca de la sala donde se realizó la presentación.
¿Qué ofrece Read? La experiencia y la imagen de un hombre de izquierda, independiente, de larga trayectoria, pero crítico con muchas de las cosas que seguramente alejaron a votantes que en su momento optaron por el Frente.
Es decir, nada más ni menos, que una puerta de entrada para tentar el voto más moderado y de centro.
A pedir de boca para Orsi.
¿Qué pide? No quedar preso de la interna ni de la orgánica frenteamplista. No depender de las decisiones de la Mesa Política ni de del Plenario ni de ningún organismo de la coalición. Poder marcas distancias y sus discrepancias cuando lo considere necesario.
Es decir, se propone ser socio, pero desde afuera. Un apoyo como parte de una alianza, una coalición más amplia que el Frente, algo así como lo que ocurrió con el Encuentro Progresista o con Rafael Michelini cuando se fue del FA y luego volvió. Procura autonomía para respaldar pero también para criticar y para no votar lo que le parezca inconveniente.
Esto tiene, por supuesto, pros y contras, sobre todo para algunos sectores del Frente que no están consustanciales con Read.
Pero eventualmente, si esta alianza se aprueba, los votos que pueda capturar pueden resultar fundamentales en un escenario como el actual. De hecho durante la presentación de su libro, habló de la necesidad de entendimientos, de llegar a diálogos entre todos los sectores y se pronunció contra la polarización que muchas veces gana en la política y en la sociedad.
Eso sí, el FA, luego puede llegar a depender de esos votos. En la ciencia política se dice que las minorías decisivas tienen gran poder de chantaje, aunque no en el sentido convencional y peyorativo de la palabra.
Habrá que ver como se procesa este acuerdo y cuales son las posturas internas en la coalición. Pero Richard Read puede convertirse en un factor político muy relevante.