ASSE, uno de los organismos más ausentes en la reforma carcelaria según Petit

Entrevista con el comisionado parlamentario para las cárceles

20.02.2025 | tiempo de lectura: 2 minutos

El abogado y experto en sistema carcelario, Juan Miguel Petit —que finalizará su gestión en octubre de este año— habló con Justos y pecadores, y enfatizó que, a pesar de las dificultades en esta área, cree que habrá avances. “Inyectar oportunidades es el rol del Estado”, remarcó.

“En los últimos cinco años, ASSE ha sido uno de los actores que ha estado más ausente en pos de la reforma carcelaria, que debió tener una política mucho más vigorosa para las cárceles, en materia de tratamiento de adicciones, de coordinaciones con los servicios externos, en atención psicológica, en salud mental”, dijo en forma crítica el comisionado parlamentario para el sistema penitenciario, Juan Miguel Petit.

“Es muy desesperante que en muchas cárceles no haya ni siquiera un psicólogo brindando atención”, advirtió también Petit, y agregó que “ASSE es un organismo muy potente que maneja muchísimos recursos”, e incluso lo catalogó como “un Estado dentro del Estado”.

En ese sentido, el experto destacó que existen varios ejes para fortalecer una red que es muy débil en torno a una reforma penitenciaria, y citó el ejemplo de varios países del mundo, especialmente europeos y más estrictamente nórdicos, que han logrado mayor seguridad, ciudadanía y democracia.

Esto ha sido posible, según destaca Petit, merced a otras medidas aplicadas en materia de Rendición de Cuentas, como el denominado Plan de Combate a la Reincidencia, impulsado en 2021 con prisiones de corta duración, prisiones diversas, ajustadas a la personalidad del recluso, prisiones de rehabilitación, medidas alternativas, trabajo pospenitenciario (que entiende es fundamental), un mayor involucramiento de ASSE, y la consolidación del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) como organismo descentralizado.

“Más allá del Ministerio de Justicia, el paso fundamental es que –dependiendo del Ministerio que sea- el Instituto Nacional de Rehabilitación debe tener su propio presupuesto, su peso político y una voz fuerte política en el Parlamento, para negociar y explicar para qué lo quiere”, remarcó Juan Miguel Petit.

Haciendo especial énfasis en la reforma penitenciaria, el entrevistado destacó que “hay un proceso de cambios que ha tenido varios impulsos”, y que el tema está definitivamente instalado y discutido por parte de los distintos actores políticos.

Es así que se tiene claro que para que la reforma sea posible tienen que participar diversos organismos, y no solo el Ministerio del Interior, sino un mucho más presente ASSE, según entiende Petit, “con un rol mucho más proactivo del que tuvo hasta el momento”. Además, sugiere la presencia del Mides, el Ministerio de Educación y Cultura, y organizaciones de la sociedad civil.