Chilenos votan obligatoriamente el domingo para definir si se reforma la Constitución
Politóloga chilena advierte por la campaña de desinformación y noticias falsas
02.09.2022 | tiempo de lectura: 2 minutos
El próximo domingo 4 de septiembre los chilenos votarán para aprobar o rechazar el nuevo texto de la Constitución que se ha redactado en un proceso de casi un año.
El referéndum, de resultado vinculante y participación obligatoria, es la etapa final después de un proceso constituyente de casi un año, disparado a partir del estallido social de 2019 donde el 80% de los chilenos votó a favor de cambiar por completo de una Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet, aunque desde 1980m hasta nuestros días ha sufrido algunas reformas.
Para Pamela Figueroa, doctora en Ciencias Políticas y docente chilena, el resultado del domingo es incierto. “Las últimas encuestas conocidas ratifican que un porcentaje mayor de los chilenos estaría a favor del rechazo a la reforma planteada, pero no puede establecerse como un resultado seguro, ya que se trató de una campaña llena de noticias falsas y desconocimiento” por parte de muchos ciudadanos.
Destacó el contexto político “muy particular” que vive Chile, donde conviven un gobierno, un congreso y una constituyente donde la representación es diferente en cada uno de esos estamentos.
La nueva Constitución, definida como “plurinacional, intercultural, ecológica y regional”, depende del “apruebo”, como opción electoral en la instancia del próximo domingo.
Figueroa recordó que la necesidad de modificar la Constitución tuvo gran consenso tiempo atrás, “pero algunos de los contenidos puestos a consideración de los ciudadanos resultan muy controvertidos”.
Los artículos más controvertidos hablan de la justicia indígena paralela y de la disolución del Senado.
Figueroa advirtió que de ganar el rechazo, queda vigente la actual Constitución. “No existe ninguna normativa” que establezca la obligación de hacer un nuevo llamado, aunque desde el punto de vista político “hay coincidencia en que debería trabajarse en la búsqueda de acuerdos que permitan modificar el texto constitucional en otra instancia no muy lejana en el tiempo.
Foto: Efe
Texto: Luis Custodio