El martes 15 de junio, Círculo Católico toma posesión del sanatorio de Casa de Galicia

Los trabajadores de la mutualista liquidada cobrarán los despidos pendientes a partir de los fondos obtenidos en el remate

09.06.2022 | tiempo de lectura: 2 minutos

La liquidación concursal de la mutualista, cuyo cierre fue decretado por la justicia a fines de diciembre, tuvo su instancia más importante ayer, con el remate del sanatorio cerrado en marzo, que pasa a manos del Círculo Católico.

El síndico que tuvo la mutualista desde su cierre, Fernando Cabrera, gerente de Servicios Jurídicos de la Liga de Defensa Comercial, explicó que el centenar de trabajadores que aún están en actividad, encargados de los IMAE y del mantenimiento del edificio, serán cesados la semana próxima. “Desde ese momento, se debe encargar el comprador”, puntualizó.

El Círculo Católico se hace cargo de los seis padrones, el edificio y su equipamiento el próximo martes 15. “No hay plazo establecido para la reapertura del sanatorio”, advirtió Cabrera.

Además, el nuevo propietario asumirá también la administración del IMAE nefrológico, cuya operación dependía de Casa de Galicia.

Las otras tres instituciones de medicina altamente especializada, dedicadas a la atención cardiológica, seguirán siendo operadas por clínicas privadas, hasta que se resuelva qué mutualista se hará cargo de cada una de ellas.

Paralelamente, Cabrera comentó que para el día 20 de este mes está previsto el remate de cuatro policlínicos de Casa de Galicia en distintos puntos de la ciudad. Entre ellos, el edifico del centro de Montevideo, donde también funciona la sede social.

Quedan para otra instancia otros tres padrones menores, propiedad de Casa de Galicia, que también serán rematados.

Distinta suerte correrán los denominados “bienes culturales”. Cabrera dijo a Informativo Uruguay que esos activos, compuestos por trajes típicos, banderas, cuadros y otros objetos de fuerte valor cultural para la comunicad gallega, “no serán rematados, ya que hay una oferta por el lote de parte de la Xunta de Galicia para adquirirlos.

Una vez cumplidos todos los remates, “vendrá la parte de cubrir las deudas”, comentó el especialista.

En ese sentido, con el 15% del valor total en que fue rematado el sanatorio –el 85% restante se financia a 14 años, además de las subastas pendientes, se debe hacer frente a los acreedores prioritarios, “que son los ex trabajadores”, subrayó.

Otros acreedores, como el BPS y empresas públicas proveedoras, no podrán acceder al pago de sus deudas ante la falta de capital.